Escuche este episodio PRÓLOGO Pinceladas de Recuerdos: Viaje a las entrañas de una familia memorable Me sumerjo en los recuerdos de mi infancia en la Hacienda Dinamarca como quien atraviesa un río de memorias perdidas, donde aún resuenan los ecos de un tiempo que se resiste a desaparecer. Allí, entre sus rincones sagrados, los espíritus de antaño parecen observar, envueltos en la brisa perpetua del pasado. Cada espacio guarda susurros de historias que el viento se niega a olvidar; las sombras de los árboles antiguos custodian secretos, y el aroma de la tierra húmeda evoca ecos de pasos que alguna vez recorrieron sus senderos con la devoción de una peregrinación. Aquella casa de campo, con sus muros de tapia y sus ventanas abiertas al infinito, parecía respirar con nosotros —guardiana silenciosa de memorias que el viento no ha podido llevarse. En las faldas orientales de Antioquia , San Carlos era un rincón donde Dios había ensayado todas las tonalidades del verde, como si hubiera ...